¿Cómo cultivar achicoria? La achicoria es una planta originaria de Europa y Asia, que se ha cultivado desde la antigüedad por sus beneficios nutricionales y medicinales.

Actualmente, se puede encontrar en todo el mundo y es muy popular en la cocina argentina, donde se utiliza tanto la raíz como las hojas en ensaladas, guisos y otros platos.

Sobre la siembra

Germinación de la semilla: Se recomienda sembrarlas a una profundidad de 1 a 2 centímetros en un suelo bien drenado y húmedo.
Época de siembra: El momento ideal es en primavera o en otoño, dependiendo del clima de la región.
Combinación de cultivos: Algunas plantas como las frutillas o fresas y la zanahoria san buenas compañeras de las achicorias.

Requerimientos

Tipo de suelo: Prefiere suelos bien drenados y ricos en nutrientes, pero también puede crecer en suelos menos fértiles. Es importante evitar suelos demasiado compactos o arcillosos, ya que pueden dificultar el crecimiento de las raíces.
Requerimientos de sol: La achicoria necesita sol directo para crecer adecuadamente, aunque también puede tolerar sombra parcial en climas cálidos. Es importante tener en cuenta que es una planta resistente al frío y puede tolerar heladas ligeras
Necesidad de riego: Necesita mantener el suelo húmedo, pero no encharcado. Es recomendable regar con regularidad y evitar que el suelo se seque completamente.

Cosecha

Las hojas de la achicoria pueden ser cosechadas a medida que crecen y se pueden utilizar en ensaladas o como guarnición en diversos platos. La raíz de la achicoria se puede cosechar después de que la planta haya alcanzado su tamaño máximo, generalmente después de 100 a 120 días de siembra. Para cosecharla, es necesario desenterrar la planta y cortar las raíces.

Beneficios

Beneficios nutricionales: Es una excelente fuente de nutrientes como fibra, vitaminas A y C, calcio y hierro.
Beneficios medicinales: Mejora la digestión y reduce la inflamación en el cuerpo. En la cocina argentina, se utiliza la raíz de la achicoria para preparar una bebida conocida como «café de achicoria», que se utiliza como sustituto del café y se cree que tiene beneficios para la salud digestiva.

El cultivo de la achicoria es relativamente sencillo y puede ser una excelente adición a cualquier huerta. Al seguir los consejos de siembra, riego y cuidado adecuados, se puede obtener una planta saludable y productiva, que además ofrece beneficios nutricionales y medicinales para quienes la consumen.

Posibles enfermedades y tratamientos:

La achicoria es susceptible a diversas enfermedades como la roya y la podredumbre de la raíz. Para prevenir estos problemas, se recomienda mantener la planta bien ventilada y evitar el exceso de humedad en el suelo. En caso de que aparezcan enfermedades, se pueden utilizar tratamientos fungicidas específicos para cada caso.

Conocé más sobre plagas y enfermedades

Bueno, ya sabés cómo cultivar achicoria en casa. ¡Que te salgan sabrosas y saludables!

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